Ser secretaria no es un trabajo fácil. Requiere perseverancia, resistencia y, especialmente para los jefes difíciles, siempre debes ponerlo a él en primer lugar y hacer todo lo que hace mal. Sakura Mahiru no es una excepción. El director la llamó a la oficina como esclava sexual solo porque se sentía incómodo y anhelaba tener relaciones sexuales. Estaba frustrada y asustada, pero no sabía qué hacer aparte de seguirla. ella no quería perder su trabajo con su alto salario actual. Y, sin embargo, un jefe ya era difícil de complacer, pero ahora llamó a algunos accionistas más para que vinieran y disfrutaran, obligándola a hacerlo. hazlos felices. Es sólo que la solitaria secretaria tiene que sacrificar su cuerpo para servir a los placeres fugaces de magnates inhumanos.